A pesar de ser un fiel seguidor de Buffett y Munger, habiendo consumido con avidez todo lo que han escrito, visto casi todas sus reuniones anuales y leído numerosos libros sobre su estilo de inversión, aún no había encontrado una filosofía de inversión que realmente resonara conmigo hasta que me topé por casualidad con esta entrevista durante la pandemia.
Después de aquel momento, experimenté un cambio significativo: empecé a entender la inversión no como una cuestión de números o gráficos que fluctúan, sino como la propiedad de un negocio real. Desde entonces, se ha convertido en un ritual personal revisarla al menos una vez al año.
Si alguien me preguntara qué inversor me gustaría emular, sin duda diría Anthony Deden. Me cautiva la nitidez de su pensamiento, la manera sencilla y directa con la que aborda la inversión, su búsqueda de resiliencia en las empresas, su enfoque de largo plazo y, sobre todo, la forma en la que se ve a sí mismo como copropietario del negocio, y no simplemente como un especulador ansioso de comprar a 1€ para vender a 2€.
Si, soy un enamorado de Warren Buffett, pero soy consciente de que su abanico de inversión es demasiado amplio y complejo, no así sus consejos, con lo que Anthony Deden es el espejo en el que me miro.
Es el enfoque con el que me siento cómodo, el que realizaré toda mi vida inversora, con el que gestionaré mi capital y aportaré seguridad a mi familia y el que transmitiré siempre a aquellos que sigan interesados en leerme. Podré equivocarme en la selección de acciones, pero no en la filosofía.
Lo que busco al invertir es dormir tranquilo por las noches. - Anthony Deden
Este sábado por la mañana tuve el placer de prepararme un café, acomodarme en mi sillón y deleitarme con dos horas de esta magnífica entrevista. No es común que dedique publicaciones a compartir videos, pero dada la calidad excepcional de esta entrevista, y la escasa información disponible sobre Deden, te animo fervientemente a reservar dos horas de tu tiempo para absorber toda la sabiduría y experiencia que destila.
Algunas perlas de su filosofía, que podéis encontrar resumidas en el siguiente enlace, serían las siguientes:
El capital que se da a los administradores de dinero es un “ahorro de toda la vida” de una familia y debe ser respetado, ya que es difícil ganar dinero y aún más difícil mantenerlo.
El riesgo real de la inversión es la idea de perder el capital de forma permanente sin la capacidad de recuperarlo en lugar de la definición de riesgo de la gente, que en realidad significa incertidumbre. Cuidado con lo que podría salir mal en lugar de lo que puede salir bien. Es mejor equivocarse del lado de la inacción que tomar medidas irreflexiones a toda prisa.
No tiene sentido tener diferentes carteras para diferentes clientes en función de sus necesidades especiales únicas y su percepción del riesgo, porque lo que realmente consideran riesgo podría no ser un riesgo en absoluto.
En lugar de tratar de impresionar a su cliente, trate de proteger lo que ha pasado años acumulando.
En lugar de estar constantemente en busca del crecimiento, los inversores deberían deliberar sobre la idea de la resistencia y la durabilidad de una empresa. Trate de averiguar cuáles son los ingredientes que han contribuido a su supervivencia como empresa durante tantos años. En lugar de estudiar por qué las empresas fracasan, empieza a buscar rasgos que hagan que las empresas sobrevivan a la prueba del tiempo.
Hay una diferencia sustancial entre las personas que son inversores y las personas que son propietarios de negocios. Ningún propietario de un negocio se despierta cada mañana preguntándose qué vale, entonces por qué debería hacerlo un inversor si realmente cree que es un copropietario. Y si cree que es un copropietario, entonces su primer objetivo es asegurarse de que la empresa sobreviva, tenga un gran producto, una fuerza de trabajo feliz, proveedores estables y un cliente encantado. Ahora, para pensar así, un inversor necesita tener una preferencia de tiempo que sea diferente a la de otras personas.
Me despido con la esperanza de que este artículo pueda tocar el cable a algún lector del mismo modo que hizo conmigo hace tres años. Quizás algunos entendáis así, porque estoy replanteándome la adquisición que os he comentado en mi última publicación.
Me han gustado mucho tus reflexiones, creo que preservar el capital es prioritario a largo plazo, evidentemente, pero, dado que nuestro horizonte temporal es tan largo, no todo pueden ser guardianes de cartera, asumir algo de riesgo esperando mayor rentabilidad debe ser obligatorio en una parte sustancial de la cartera.
Gracias de nuevo.
Por cierto, dormir tranquilo no tiene precio
Magnífico el vídeo. Lo vi hace unos meses y lo tengo guardado como oro en paño!